Autoestima

             Este es un post que he postergado mucho, no por el qué dirán si no por mí.

            Cuando estaba más pequeña recuerdo que era voluminosa, gordita o como le quieran decir, me crecieron un poco los pechos cuando a la gran mayoría aún no, pero eso nunca fue problema, era emocionante más bien ser de las primeras que experimenta eso, cuando pase a primero del bachillerato comenzaron los problemas conmigo misma, mi vida se hizo un caos total, pero yo no lo contaba, siempre he sido muy cerrada en ese aspecto, mis problemas son míos y de nadie más, nadie debe escuchar y eso es un error, es mejor ser escuchado; recuerdo que la primera semana del bachillerato no me sentía cómoda, sin embargo, me decía mentalmente “ya te acostumbraras” y es que al ser hija o familiar de profesores y luego estar en un colegio donde no hay nadie de tu familia es un daño, porque te acostumbras a que por x o y siempre te defiendan, esa semana empecé a sobre cargarme, estaba en la sinfónica, tenía tareas, mi mamá era directora que se dedicaba al 80% a la escuela donde estaba por lo tanto llegaba a casa almorzando, cuidaba a mi hermano y nos íbamos a la sinfónica, había días que no iba porque estaba demasiado cargada de tareas y yo quería ser buena en el bachillerato porque nos meten en la cabeza que no es fácil, nunca me dije “está mal que tu mamá no esté en casa para verlos crecer”, ella estaba consciente de eso pero quería también quería ser buena en el trabajo, fueron tiempos difíciles, luego de unas semanas en el colegio había un grupo de personas que me hacían sentir mal conmigo misma, y yo ingenuamente me lo creía, había tardes que llegaba a casa y no comía, llegue a bajar como 10 kilos más o menos porque no almorzaba, no me decían gorda ni nada por el estilo pero uno se crea unos fantasmitas mentales que te dicen que hay de mal en ti cuando no es así porque otras personas alimentan esos fantasmas, con eso traje mi primer problema de salud que fue “cálculos en la vesícula” a los 11 años, en segundo de bachillerato era más lo que faltaba que lo iba para evitar que esos fantasmitas mentales me siguieran consumiendo, hubo un día que me sacaron de la casa a fuerzas y ese mismo día me fui a las 10 am del colegio porque no quería estar y me inventaba que me sentía mal, en ese momento estaba muy de moda cortarse las venas, nunca lo vi muy relevante pero hubo un día que lo intente (mood: drama con un cuchillo de mantequilla), en ese momento se me cruzo por cabeza solo mi familia y ahí deje todo, supe que tenía un problema así que al tiempo Demi Lovato saco su documental sobre los problemas alimenticios, yo sabía que no era mi problema porque mi problema era mi autoestima, el hecho de sentirme fea, al verme ese documental fue una motivación en parte, aprendí a que todos pasamos por problemas con nosotros mismos alguna vez, que es un trabajo diario construir una buena vista sobre ti, en medio de ese proceso apareció uno de mis primeros novios y digamos que me ayudo un poco con ese proceso sin saberlo, cosa que siempre agradeceré.

¿Cómo supere esto?

            A los golpes, tuve que verme en el fondo de mi recaída para darme cuenta que debía encontrarme,  hay días que me despierto y tengo mi autoestima por los cielos y me quiero comer 5 kilos de papas fritas y me veo cachetona y mentalmente esos fantasmitas me dicen “estas engordando, te ves mal, te van a salir más acné” pero sabes, estoy siendo feliz engordando, si quiero seguir comiendo papas lo hago, como también es cierto que hay días que amanezco con el autoestima mal, que me veo en el espejo y me veo gorda, no me gustan mis brazos que me juzgo por la forma de mis labios, y así voy, hay días malos como días buenos, lo cierto es que un día solo dura 24h, no todo el día me sentiré así. Si quieres ir al gym y tener un cuerpo envidiable hazlo por ti, porque quieres no porque te lo demanden, si quieres tener el pelo largo y decolorar y el mundo te dice “está mal” pero tú te sientes bien, déjatelo, si quieres ser vegetariano o si te quieres maquillar, hazlo por ti, siempre por ti y no porque el mundo te diga que debe ser así porque al final del día el mundo  hace lo que los demás hacen y si tú no te sientes bien, nada está bien.

            Recuerda que todos tenemos una historia, por más pequeña que sea, cuéntala para que los demás aprendan de la tuya.

            En los próximos post hablaré del porqué no subo post tan seguidos y de la situación de mi país. Bonito día, hasta la próxima