2017

                 Este año fue un poco intenso, fue fuerte y lleno de muchos momentos malos, caos como lo llamaría yo, fue lento y al mismo tiempo reflexivo, pero también hubieron buenos, nacieron muchos niños que fueron una sorpresa, como otro que como diría comúnmente, fue una bendición para otra familia que es como si fuera la mía, antes de despedir el año con un vino o un champagne voy a dar una pausa y reflexionar sobre todas las caídas y todos los triunfos, todo lo bueno como lo malo, los propósitos que no cumplimos y los que sí, todas las experiencias buenas y malas vividas porque eso representa todo un año, representa una vida, significa que para este año nuevo tienes nuevas oportunidades de amar, comer, crecer, ayudar, dar más de ti de lo que diste el año que se nos va, debemos recordar que debemos pensar más en los demás como en nosotros, tener una balanza en nuestras vidas cotidianas( trabajo-familia-amigos-tú), tener tolerancia, respeto y esparcir todos los buenos valores que nos dejó nuestra familia, cumplir los propósitos que no nos hemos cumplido y cumplir también las promesas que hemos roto porque tienen algo de valor, disfrutemos de este año que se nos viene, podemos ser mejores personas, no comunes, no malas, no como el resto y no solo, simplemente únicas, no solo en navidad o año nuevo sino en todos estos 365 días. Disfrutemos de este 2018 como nunca, hagamos de este año solamente increíble que para este mismo día el año entrante no tengamos palabras para describirlo, y no olvidemos que tenemos una lista de propósitos que todos los años que nos olvidamos cumplir, feliz año nuevo, se les quiere, nos leemos más pronto de lo que creen.